Satanás es Real — Lea estas Asombrosas Historias

La historia se está esparciendo en los medios de prensa y, lo que es inusual para una historia de esta naturaleza, el fenómeno sobrenatural y la subsiguiente liberación de Latoya y su familia se han abordado de manera seria y objetiva. Parte de la razón para que esto suceda es que un terco policía llamado Charles Austin y que estuvo involucrado, dudaba de la dimensión paranormal y pronto se convenció de lo ocurrido.

Una mujer con tres hijos que afirmaban estar poseídos por demonios. Un niño de 9 años que caminaba hacia atrás subiendo por la pared en presencia del administrador de la familia y una enfermera del hospital.

El Capitán Charles Austin del Departamento de Policía de Gary dijo que fue la historia más extraña que jamás ha escuchado.

Austin, un veterano con 36 años de servicio en el Departamento de Policía de Gary, señaló que inicialmente pensó que la residente de Indianápolis, Latoya Ammons y su familia habían inventado la historia como una forma de ganar dinero. Pero luego de varias visitas a su casa y de entrevistas con los testigos, Austin simplemente señaló, "soy un creyente."

Pueden leer la historia completa de la casa encantada y la posterior posesión –y luego la liberación de Latoya y sus hijos aquí y aquí.

Una de las cosas sorprendentes sobre esta historia es que aquellos que estuvieron involucrados no llamaron a un pastor protestante para llevar a cabo el exorcismo. Una vez me llamaron para ir a una casa de mi diócesis que estaba encantada y cuando les pregunté a las personas por qué no llamaron a su propio pastor de la mega-iglesia local, ellos simplemente se rieron y dijeron que su pastor no podía manejar cosas de ese tipo y que sabían que debían llamar a un sacerdote católico.

El Padre Andrew Trapp: un sacerdote joven en mi misma diócesis de Charleston registra aquí su entrevista con un antiguo satanista en Francia.

El pobre hombre probablemente se sentía como si estuviera siendo interrogado por la CIA a esas alturas, pero sabiendo que tal vez nunca tendría esta oportunidad nuevamente, le hice a Nicolás una última pregunta. Le dije que también había escuchado que los que están bien compenetrados con el satanismo pueden decir si una hostia ha sido consagrada o no. Por ejemplo, no robarían los panes de la comunión de las comidas de comuniones protestantes, ni robarían el pan de la comunión no bendito para su profanación en estas "misas negras". No funcionaría porque algunos de los satanistas reconocerían inmediatamente que se trata de simple pan. Eran capaces de darse cuenta que Jesucristo no estaba presente ahí sacramentalmente.

Las mismas verdades se revelan en ambas historias. Primero que nada, que Satanás y los demonios son reales. En segundo lugar, que es al sacerdote católico y la Eucaristía Católica a quienes desprecian, blasfeman, de quienes se burlan y a quienes temen.

Le pregunté a Nicolás si eso también era cierto.  Nuevamente me dijo que así era, y dijo además que él mismo lo podía hacer antes de su conversión del satanismo. Una sensación de frío me recorrió la espina dorsal. Si alguien le hubiera puesto diez hostias de comunión en frente, nueve sin consagrar y una consagrada, él hubiera podido señalar directa e inmediatamente la hostia que había sido consagrada. Le pregunté sorprendido, "¿Pero cómo podías saberlo?" Me miró y las palabras que me dijo me han quemado desde entonces en la memoria: "Por el odio," me dijo. "Por el odio abrasador que sentía hacia esa hostia, distinta a todas las demás".

Lean el relato completo del Padre Andrew sobre su encuentro con el satanista aquí.

Las mismas verdades se revelan en ambas historias. Primero que nada, que Satanás y los demonios son reales. En segundo lugar, que es al sacerdote católico y a la Eucaristía Católica a quienes desprecian, blasfeman, de quienes se burlan y a quienes temen.

¿Qué podemos sacar de estas historias chocantes y dramáticas? En primer lugar, el recuerdo no solo de que Satanás y sus subordinados son reales, sino que muy a menudo se esconden. Satanás es un mentiroso y a menudo viene disfrazado como un ángel de luz. No nos tienta primero con el horror, la blasfemia y la violencia, sino con una forma perversa de lo bello, lo bueno y la verdad.

Estoy convencido de que no es coincidencia que el Papa Francisco hable frecuentemente sobre la realidad de Satanás. Me impresiona que una de las pocas veces en la que dos papas se reunieron fuera para dedicar una nueva estatua de San Miguel Arcángel, el príncipe que nos ayuda en nuestra batalla contra Satanás. Esto se debe a que estamos entrando a tiempos oscuros. El espíritu del ateísmo ha pasado del este al oeste. Se divisan nubes de tormenta en el horizonte para Cristo y su Iglesia. Satanás es fuerte y no duerme.

Si estás leyendo este post, recuerda que el truco favorito de Satanás –su mentira favorita–, es decirte que él no existe.  Esta mentira se presenta de diversas formas. La más descarada es decirte que tanto él como Dios no existen. La segunda forma es dejarte creer en Dios, pero decirte que él no existe; que tal creencia es medieval o supersticiosa. Esa es su mentira. No la creas. La tercera forma de la mentira es que él no es realmente un ser personal, que "el diablo" es simplemente otro nombre del mal o de "la sombra" o "el lado oscuro de la fuerza".

No.  Esas son mentiras.  La verdad es que Satanás es real.  Si tú eres un cristiano, él te odia.  Quiere destruirte.  Quiere devorarte.

Finalmente, recuerda las palabras de las Sagradas Escrituras: "Hermanos, estén alertas y despiertos, porque su enemigo, el diablo, ronda como un león rugiente buscando a quién devorar".